Aparición de la cantante

Esta es la segunda vez que me afano una obra, bueno casi diría que son dos, de don Gyula Kosice. En esta oportunidad delante de sus narices, pues como verán él mismo está en la foto que tomé de la versión digital de Clarín del 10 de julio, artículo “Tendremos que irnos a vivir a la Ciudad Hidroespacial”. A mí me parece que no sólo es uno de los grandes artistas que tenemos sino que es en absoluto coherente con lo que hace y además “hace” antes que decir, pregonar, venderse, alabarse, justificarse, etc. etc., que es mal de muchos. Quizás por ese respeto, y otro poco por la fascinación de lo brillante, le volví a transformar sus obras, esta vez en una fantástica cantante del futuro que está a punto de ejecutar sus más dulcísimas voces para un público igualmente estrafalario. ¿Remember El quinto elemento?