Banderas digitales de festejo dominical

Esta escena es curiosa por ser un policía el que capta con su cámara todo el movimiento del clásico Boca-River. Desde luego, y sobre todo por pertenecer al sexo masculino para el cual estos eventos deportivos tienen lugar de privilegio en sus cerebros, no pudo substraerse a la fiesta a pesar de las funciones que debía cumplir y que supuestamente lo inhibirían de ésto. Lo ilógico en todo caso, es que está riéndose: eso sí que es una curiosidad que sólo la podría superar un edecán presidencial levantando hacia arriba la comisura de los labios. La solución que di a mi obra tiene que ver con los festejos por su forma y colores, pero aún así no logra llegar al movimiento y colorido de las tribunas populares. La foto la tomé del suplemento Deportivo de Clarín del lunes 20 de octubre, página 10.